Habría recorrido cerca a un kilometro y me paré detrás de un moto taxi estacionado en unas de las casitas de madera que aparecia en el camino…llevaba un tapa-barro con la figura del che Guevara , imaginé que el dueño habría idealizado a este personaje solamente como un líder rebelde sin envestiduras, del cual seguramente no sabría nada, ya que el lugar fue azotado por el terrorismo, el narcotráfico y los militares...me eran más creíbles los leones del África a ambos costados con un paisaje exótico de la selva... luego miré al pacay y mi botella de agua vacía y lo coloqué en la parte de la parrilla de la moto junto a la botella y pensé en el viaje del pacay…
seria exactamente lo productivo… algunos minutos antes habíamos hecho una parada en la casa de la amiga de mi guía que amablemente me invitó a conocer algunas plantas que coloreaban un hermoso jardín en medio al paisaje verde, que se inspiraba entre montañas, llegamos a un árbol lleno de pacayas enormes tanto como en el árbol, habían muchos regados en la tierra, pudriéndose con el sol, ella subió a sacar algunos del árbol y llevarlos para el camino, abrió uno para probarlos y tenían unos granos enormes que me basto 4 para estar satisfecha y aun quedaban más de la mitad, era dulce y esponjoso, eran en todo el sentido de la palabra...HERMOSOS, le dije que me daba mucha pena de verlos en el piso desperdiciados habiendo tantas formas de aprovecharlo, me dijo que no valía la pena pues el flete costaba mucho que se aburrían de comerlos y que ella tenía solo algunos árboles, entonces le pregunté por qué no hacer mermelada, helados, pasteles que pudiera vender en los pueblos o quizá pensando a mayores, lograr abastecer cierto sector de la capital... era cuestión de recaudar comprando a los vecinos hasta llegar a una suma necesaria para su productividad y poder alcanzar un estándar, así haría que el producto genere trabajo, así que ahí estaba su propio negocio sin desperdiciar lo que la tierra nos daba, mientras se quejan que no hay dinero... cuando el dinero está delante de ellos, pero siempre hay un pero....que valga..
La mujer se quedo pensando y me dijo... si...no?



Seguimos con la iniciativa de apostar por la selva están ciegos por sus propios ojos por la falta la iniciativa que les aqueja, apostamos por la selva por hacerla prevalecer, para cuidarla reforestarla porque también la aprovechamos, hay que amarla, respetarla,limpiarla...y nuestra capacidad de poder encaminarla... es la iniciativa…
No dejemos que el viaje del pacay sea frustrado...apostemos por la selva y sus proyectos... hay mucho que dar y recibir es solo cuestión de conciencia e iniciativa y claro, sin descontar algún capital que es necesario para pagar el viaje...